miércoles, noviembre 17, 2010

Y PEGA LA VUELTA ?

Foto: diario Correo de Ica



La frecuencia: Radio Luz de Tarma

La jornada deportiva que se vivió en Chincha fue cubierta con bastante precisión por Radio Luz de Tarma. Con media hora de antelación, ya se estaba viviendo la previa con alineaciones y comentarios de lo que ocurría en el estadio Municipal de Grocio Prado. Además, en el momento que los equipos salieron a la cancha se pudo escuchar algunas declaraciones de los protagonistas gracias al trabajo de campo de los periodistas. Ya comenzado el partido, Moisés Mayor se encargó de la narración acompañado de Augusto Mayor y Mayko Araujo en los comentarios. Resaltó la antipatía del trío hacia Édgar Palma al que acusaron todo el partido de no sudar la camiseta.

La pizarra: Vendaval sitiado

Mifflin Bermúdez sabía que contaba con un colchón de goles suficiente para no tener que arriesgar en el encuentro. Aún así, prefirió la prudencia y mandó a la cancha un 5-3-2 con la intención de amarrar el encuentro y cortar el circuito de ideas de locales. La defensa fue comandada correctamente por Juan Cahuas, aunque tuvo que suplir algunas deficiencias de Jimmy Gómez y David Ponce de León. En media cancha, se pudo notar el buen entendimiento entre Jaime Cuadros y Martín Gutiérrez para recuperar balones y alimentar a Dante Gil y Édgar Palma, quienes muchos no pudieron en ofensiva. Joe Gutiérrez, por su parte, se mandó al ataque desde el primer minuto por orden de el ‘Brujo’ Medardo Arce quién dispuso un simple 4-cuadrado-2. Luis Figueroa y José Morales fueron los encargados de comandar el ataque pisqueño y juntarse con Caldas y Revatta para destruir la muralla tarmeña. El ‘9’ de los locales siempre fue un dolor de cabeza y más aún cuando entró Torrealba para inyectarle desequilibro al juego del Joe Gutierrez.

Los cambiazos: Inversión bancaria

Lo más destacado de cada conjunto llegó desde el banco. Primero, a los 29’, el ‘Brujo’ Arce no aguantó la pasividad de su equipo y sacrificó a Paulo Vilca para darle cabida al movedizo Jesús Torrealba. El volante se convirtió en el arma más letal de los locales desde que ingresó al terreno de juego y pudo generar un penal que lamentablemente desperdició. Por otra parte, lo más resaltante de los cambios del ADT llegó de los pies de Pablo Valdivieso. Al igual que Torrealba, Valdivieso llegó a ser de lo mejor en la recta final del partido al anotar un golazo con tan solo seis minutos en cancha.

El capo: Juan Cahuas

A pesar de tener una que otra salida en falso, el zaguero resaltó en un equipo que salió a defenderse desde el pitazo inicial. Los relatores del el encuentro se encargaron de resaltar sus falencias técnicas con el balón en los pies, pero Cahuas fue de los disputó el cotejo con mayor intensidad. No se amilanó cuando las papas quemaban en su área y se dio el gusto de anotar el empate momentáneo.

El extraviado: Édgar Palma

Aunque el carga montón hacia el moreno jugador llegó a lo innecesario, lo cierto es que no pudo hacerle justicia al cartel con el que llegaba a Chincha. No ganó una sola pelota dividida y las que tuvo sencillas, las volvió complicadas. No solo no llegó a sumar para su equipo sino que se dedicó a restar.

CORTITAs

(A)Revatta(do): Joe Gutiérrez se había dado un lujo que no podía: fallar un penal. A los 33’, Torrealba erró el disparo desde los doce pasos que él mismo había fabricado. Recién se pudieron cobrar la revancha en el segundo tiempo, a los 50’, cuando un cabezazo de Revatta abrió la cuenta en el estadio Municipal de Chincha.

Don Juan: La labor de Juan Cahuas era bastante elogiable en la zaga, pero se esperaba muy poco de él en ofensiva. Sin embargo, sorprendió a propios y extraños al pegarle con zurda luego de una serie de rebotes en el área y decretar el empate entre pisqueños y tarmeños sobre los 70’.

Pablito clavó un golazo: Ya con el empate, y a 12’ del final, la clasificación de ADT a la siguiente ronda de la Copa Perú parecía inevitable. Pablo Valdivieso decidió ser un poco más ambicioso y encaró con peligrosidad hacia el área local para sacar un zurdazo que ingresó haciendo inútiles los esfuerzos de William Fuentes.

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